Vacaciones para muchas es sinónimo de trajes de baño, ropa bien ligera y mucha actividad al aire libre. Lamentablemente, asociamos esta agenda recreativa con estrictos regímenes de depilación, afeitadoras y cremas que eliminan completamente el vello púbico; dejándonos expuestas y altamente vulnerables a posibles infecciones de transmisión sexual y otro tipo de accidentes íntimos.
Además de sugerirte ubicar la ayuda de un profesional cuando se trate de algún tratamiento delicado o muy complicado, también resulta prudente que esperes al menos 48 horas luego de engalanar la zona para entrar en materia sexual.
Asociado a esto vale la pena mencionar que la reacción en las pieles más sensibles pueden obstaculizar hasta las sutiles caricias del sexo oral, porque, aunque quizás te parezca el momento perfecto para exhibir tu genital, el vello facial de tu pareja puede potenciar el daño ocasionado previamente, y si sientes la piel hipersensible puede resultarte abrumador cualquier roce continuado.
Si se trata de las prácticas penetrativas, a menos que tu pareja también elimine completamente el vello de su genital, puede lastimarte con el roce producto del vaivén erótico. Así que lo mejor sería esperar volver a sentir la piel relajada y observar que los poros no estén dilatados, antes de sugerir o acceder a algún encuentro íntimo.
Supongo que ya habrás escuchado que mientras vistes traje de baño y te diviertes en el agua puede aumentar el riesgo de infecciones íntimas por la humedad de la tela; este efecto además de resultar bastante probable puede aumentar exponencialmente cuando despojas al genital del “escudo protector” que provee en su justa medida el vello púbico.
Luego, cuando comienza a crecer el vello debes tener cuidado durante el roce de la penetración, porque puedes lastimar la piel de tu pareja contra los minúsculos y agresivos pelillos. Ni hablar del cuidado que debe tener tu pareja para dirigir su pene a la entrada de la vagina, tratando de esquivar este camino de “espinas”, especialmente cuando no está protegido con un preservativo o está circuncidado.
No me malinterpretes, nada mejor a la vista que un cuerpo debidamente cuidado para vestir cualquier prenda típica de verano, pero resulta importante que consideres cualquier cuidado extra para tu piel, así como también antes, durante y después de la actividad sexual.
Finalmente, y en pro de tu salud sexual, queda terminante prohibido el uso de tintes, decolorantes, aplicar cera, o maltratar la piel más sensible y profunda del genital con hojillas o cremas depilatorias.
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